Virus transmitidos por murciélagos

Proyecto placenta artificial

 Según la revista Journal of the American Medical Association, cada año nacen aproximadamente 25.000 niños prematuros en toda Europa, con una supervivencia que oscila entre el 25% y el 75%. La mayoría de los niños que sobreviven presentan secuelas de por vida.

Con el principal objetivo de mejorar el pronóstico y la calidad de vida estos bebés surgió el Proyecto Placenta Artificial, con el que se pretende crear una placenta artificial que tenga las mismas condiciones que el útero materno. Este proyecto está liderado por Eduard Gratacós director de BCNatal, junto con los hospitales Sant Joan de Déu y Clínic de Barcelona.


El prototipo de placenta artificial sería el siguiente:


El feto estará en un recipiente blando que contendrá un líquido amniótico artificial que se encontrará en movimiento, con el fin de que haya un suministro continuo. El corazón del feto bombeará la sangre a través del cordón umbilical que estará en contacto con la placenta y así se eliminarán las sustancias de desecho. El oxígeno y los nutrientes serán aportados a través de la placenta.

Este proyecto se encuentra en las fases iniciales, y ya se han desarrollado algunos de los componentes de la placenta. En la primera fase de este proyecto se estudiará el funcionamiento con fetos de ovino, y se comprobará si la supervivencia de estos fetos aumenta. Si todo sigue según lo previsto, en 6 años esta tecnología podrá ser llevada a la práctica clínica.

Otra parte importante de este proyecto consiste en la dotación a esta placenta de tecnología que permita llevar a cabo operaciones quirúrgicas en el caso de que fueran necesarias. Están desarrollando un brazo robótico que sería introducido en la placenta para poder llevar a cabo este tipo de operaciones.

Este opción de placenta se empleará para niños que nazcan con pocas semanas de gestación, para aquellos fetos que todavía no tengan sus órganos principales desarrollados.

Si este proyecto resultara con éxito supondría un gran avance en la medicina fetal, lo que aumentaría la supervivencia de los niños prematuros.


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